martes, 3 de marzo de 2015

Anécdotas de estadio


Gracias a mi papá, recuerdo haber asistido a partidos desde muy pequeño al estadio azteca, recuerdo varios clásicos y especialmente uno de ellos, yo tendría unos 9-10 años e íbamos unas 8 personas, entre las que destacaba un alemán de nombre York, amigo de uno de mis tíos que andaba de visita por el país. Pues este muchachón de dos metros de altura, como buen alemán, bebía cerveza, y vaya que bebía. Anteriormente, como referencia para los más chavos jajaja, en el azteca no había limitación en cuanto al horario para vender cerveza y llamábamos “cartero” al noble señor que te abastecía de cerveza durante el partido, es más, creo que hasta podías llegar temprano y empezar la hidratación correspondiente. Cuando ya era un grupo grande de personas, lo que hacían era cobrarte al final del encuentro, de acuerdo al número de vasos de cerveza que tenías. Pues bien, al final se nos acerca nuestro cartero de turno y nos dijo que eran “X” cantidad de cervezas, pero haciendo cuentas rápidas no cuadraban, eran muchas… le comentaron que algo andaba mal con el número de cervezas que según se habían consumido. Al final la cuenta estaba bien, nuestro compañero alemán había consumido la fabulosa cantidad de 14 cervezas en dos horas de partido… y sin tener efecto alguno, al menos de simple vista.

Otro partido que recuerdo fue la final de la copa confederaciones vs Brasil, que venía ni mas menos que con Ronaldinho como juvenil. El encuentro fue vibrante a ratos y Cuau se encargó de aniquilarlo con aquel recorte monumental con el cual el estadio se cayó. Y no volví a sentir tal emoción en el estadio hasta la final de mis águilas vs el Cruz Azul, jamás olvidaré los minutos que transcurrieron de que acabó el tiempo reglamentario a que empezaron los tiempos extras. No se cuanto fue, 10-15 minutos, en el cual el azteca estaba completamente desbordado, ese si fue un final película, donde afortunadamente el final feliz fue para nosotros.
Siempre he creído que la diversión que puede suceder en el estadio es directamente proporcional a los personajes que tengas como vecinos en la tribuna. Y para muestra un botón, uno de los partidos mas divertidos a los cuales he asistido fue a un Cruz Azul vs Tecos de hace ya algunos años, eran cuartos de final y miércoles por la noche. Cuando mi amigo Luis me llamó y me dijo que si íbamos, le contesté: Neta? Cruz azul vs Tecos?, como ya saben que no es muy difícil convencerme, accedí, pero sabía que de entrada la noche no prometía mucho. Un estadio a la mitad tal vez, un poco de frío y muy poco fútbol. Pero como si dios hubiera querido darnos una lección, ya al medio tiempo, alcanzamos a distinguir a un curioso personaje en uno de los palcos, que en realidad no son palcos. Se veía que ya llevaba varias cervezas y empezó a gritar cosas muy graciosas lo cual la tribuna entera agradeció porque en la cancha nomas no había mucho que ver, fueron de los 45 minutos mas divertidos en un estadio que recuerdo y del cual rescato frases como:

  • Traiganme esas #”$%& para acá!!
  • No mames!!, Arjona pasó por mi palco!!
  • Recordemos la temporada 83-84



Y de estas mil historias, en otra ocasión les contaré el día que nos persiguió la policía montada en el América vs Sao Caetano, el día que los de la monumental golpearon a mi amigo Luis o las incómodas veces que tuve que ir infiltrado a C.U.


No hay comentarios:

Publicar un comentario